Ni un paso atrás
La defensa de Bialystok fue férrea causando numerosas bajas en el ejército alemán a lo que se sumó los problemas causados por las marchas forzadas de la infantería que debía mantenerse en contacto con el veloz avance de los Panzers. La orden de Stalin fue mantenerse firmes para ganar tiempo y en el estricto contexto de la situación fue una orden acertada para permitir que las líneas posteriores pudieran tomar posiciones de defensa adecuadas con los acontecimientos que se estaban desarrollando, es decir, un ejército alemán incontenible ante unas fuerzas de defensa impreparadas. Desde el punto de vista estrictamente militar, era imposible contener el Blitzkrieg alemán, quedando sólo el frenar su marcha para ganar tiempo.
El final
El intenso calor secaba la tierra que en cualquier momento se convertía en lodazales debido a los intermitentes chaparrones. Una vez que cesaba la lluvia el sol secaba la tierra que se levantaba en forma de nubes amarillas de tierra arcillosa. Las condiciones del terreno más la insuficiencia de tropas para cercar completamente a la ciudad favoreció a los rusos que en número considerable lograban escapar cada vez que se presentaba una fisura. Aún así, el 2 julio la batalla llegó a su fin con la captura de 150 mil tropas rusas, 1200 tanques y 600 cañones. Nada hacía presagiar que exactamente 3 años después, el 27 de julio de 1944, el importante centro ferrocarrilero de Bialystok, sería nuevamente recuperado por las fuerzas del Ejército Rojo.
FUENTE: http://www.exordio.com/1939-1945/militaris/batallas/barbarossa/bialystok.html
viernes, julio 11, 2008
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario